La transformación digital en el sector de la restauración está en proceso y el cambio está llegando, en muchos casos, a marchas forzadas. A continuación te mostraremos los motivos que llevan a las empresas a estar en esta situación.
¿Cuál es la actualidad del sector de la restauración?
El sector de la restauración está inmerso en un proceso de cambio debido a la transformación digital. Aunque hace mucho tiempo que la tecnología se ha implantado en los negocios de nuestro país, en el sector de la restauración el proceso está siendo más lento.
En los últimos años se ha agilizado la implantación y uso de las nuevas tecnologías en el día a día de los negocios de hostelería. El motivo es que hay un relevo generacional en los negocios de toda la vida. También la gente que se incorpora es mucho más joven, con una mayor profesionalización y acostumbrada al uso de las herramientas tecnológicas.
Aunque queda mucho por hacer en el sector, actualmente la mayoría de las empresas del área de la restauración se dan a conocer a través del mundo digital. Según un estudio realizado por FEHR (Federación Española de Hostelería), el 81,3% de los negocios de restauración utiliza las redes sociales para dar a conocer sus negocios y el 75,6% lo hace a través de su web.
Aunque parecen cifras muy altas, desde mi experiencia en el mundo de la consultoría de negocios de restauración, tengo que decir que hay una gran mayoría de negocios que carece de una estrategia profesional que les lleve a conseguir sus objetivos. Lo que suele pasar en muchos casos, es que los gerentes creen que dominan las herramientas digitales y que todo es tan fácil como publicar algunas fotos del menú en sus redes.
El apoyo en profesionales que ayuden en la transformación digital es fundamental
La falta de conocimientos, de formación y de ver que las herramientas digitales son la principal fuente de información de los clientes es uno de los problemas que el sector tiene que acometer.
Esto se soluciona en una primera fase, apoyándose en profesionales que ayuden a la empresa a crear una estrategia digital, que aporte las mejoras necesarias al negocio.
Hoy en día el apoyo de profesionales del sector es fundamental para todas aquellas empresas de restauración que quieran dar el paso a la transformación digital de sus negocios. Es tan básico como tener subcontratado al gestor que hace las nóminas y controla la facturación de la empresa. Si las empresas de restauración no digitales empiezan por dejar de desconfiar en estos profesionales, será un gran paso para digitalizar el sector.
Las empresas que ya han realizado el proceso de cambio
En el otro extremo contamos con las empresas de restauración que han dado el paso hace años al mundo digital. Dentro de ese grupo, están las franquicias y grandes cadenas de restauración que cuentan con un know how instaurado y evolucionado con el paso de los años. Contra eso, los negocios tradicionales no pueden luchar porque estas empresas invierten grandes sumas de dinero y cuentan con equipos multidisciplinares entre sus filas. Pero lo que se puede aprender de ellas es que muchas de las herramientas que utilizan y cómo las utilizan, tarde o temprano, se pueden aplicar en los negocios más terrenales.
En el otro extremo del reto de la restauración está el cliente. Aquel que hay que satisfacer, ya no solo con el servicio que se le ofrece, si no con la comunicación digital que la empresa dispone.
Hoy en día el cliente puede estar no satisfecho e incluso tomar la decisión de no ir a un restaurante si digitalmente el negocio no cumple con sus expectativas.Es así de triste, pero tan real como la vida misma.
La inmensa mayoría de los usuarios de negocios de restauración consultan en sus dispositivos lo que quieren consumir. Se dejan llevar por las opiniones de otros usuarios y por la información que existe en internet. Seguramente si no estás entre los diez primeros puestos de Tripadvisor, es más difícil que te elijan. O si no tienes unas fotos atractivas en tu cuenta de Instagram puede que el futuro cliente se decida por la propuesta de la competencia.
El cliente es el que toma la última decisión
Por estos motivos mencionados anteriormente y por muchos más, la transformación digital y la irrupción de las nuevas tecnologías han creado un impacto en la relación entre los clientes y los negocios de restauración. Lo que antes era una relación unidireccional, ha pasado a ser una relación bidireccional y con una amplitud exponencial e ilimitada a toda la red de contactos de ambos polos.
Por lo tanto, el gran reto de la restauración es admitir que la trasformación digital hay que llevarla a cabo más pronto que tarde, pero de la mano de profesionales que ayuden y orienten al negocio. Una vez en la senda de la trasformación, hay que adaptarse constantemente a los cambios que los clientes puedan demandar. Y, por último, dotar de la tecnología necesaria para que el cliente disfrute antes, durante y después de su experiencia gastronómica, sea cual sea.